Si bien la conducta evoluciona naturalmente durante el crecimiento, los patrones particulares de cada menor permiten identificar alteraciones significativas. Cuando estos cambios son repentinos, alertan sobre una posible intrusión en su desarrollo.

Así lo explicó Saribel Rangel, psicóloga del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf), durante su participación en el programa Conatel al Aire:

«Cambios en la conducta, patrones de sueño, alimentación, expresión corporal, gestos o cualquier comportamiento atípico en el hogar son indicios claros de influencia externa».

Rangel enfatizó la importancia de «saber qué consumen digitalmente los menores y utilizar controles parentales» para mitigar riesgos de contacto o contenido inapropiado.

Detectar alteraciones en su comportamiento, hábitos o interacción familiar es clave para:

Prevenir delitos cibernéticos.

Reducir riesgos asociados al uso de pantallas.

Fortalecer el rol de padres y representantes como primera barrera contra amenazas digitales.

Programa Senamecf Educa: Formando redes de protección

Esta iniciativa capacita a educadores, padres y menores para:

Identificar riesgos en línea.

Promover el uso consciente de pantallas.

Reconocer si son víctimas en redes sociales o chats de videojuegos.

Cifras clave:
+9,000 personas formadas:

2,000 niñas y niños.

5,000 adolescentes.

2,000 educadores y representantes.

El objetivo es que los participantes repliquen estos conocimientos, creando una red de apoyo intergeneracional que prevenga ataques y brinde contención ante amenazas, destacó la directora del Senamecf.